Capítulo 21

Kuronuma Sadako: Genial que te gustara! Toda la canción la intenté crear yo, jaja. Pero parece que no salio mal no? Saludos.

nats: Todo a su tiempo nats, lo descubrirás pronto. =D

tres de tres: si, angie puede que haya echo una de pillada... en este cap se ve todo!

Marii: Claro que me gusto el premio, y me encanta que me digas que te gusta como escribo, en serio. Muchas gracias!

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-Gracias Rai, que bonita es, cantas de maravilla!- Le volví a besar, haciéndole callar. Le eché encima mía, recostándonos en el sofá. Le rodeé la cintura con mis brazos presionándola contra mi. Ella tomo las riendas, poniéndose encima mía. Me miró a los ojos divertida, segura, hermosa... cuando se quito su bonito jersey color pastel, quedándose con una camisa blanca. Jugué un poco con ella, moviéndome debajo suya, y agarrándole las caderas. Continuamente, ella se desabrochó un par de botones la camisa, dejando un escote increíble. Metí mis manos por este mientras ella suspiraba lamiéndome el cuello. Ella me levantó la camisa, dejando al aire mi torso, acariciándolo, como siempre. Se movía, cogiendo el compás. Yo le observaba incrédulo, era increíble la confianza que había tomado hacía a mi. Como tenía una falda corta puesta, se la levante, y acaricié sus largos muslos. Ella me desabrocho el pantalón, tocándome por fuera de la ropa interior. Cuando fui a meter las manos por su ropa, fue cuando me corto.

-Rai, ya vale!-Decía mientras le hacía cosquillas.-Tus padres están arriba, nos podrían ver!

-Qué va! No nos van a molestar.- Le bese e intente de nuevo la operación braguitas.

-Qué no Rai!- Yo suspiré esperando a que se dejara, y cuando iba a introducir mis dedos en ella...

-Rai, os voy a bajar algo de merendar!- Decía mi madre bajando las escaleras. Mils me miro con cara de poker y se quito rápidamente de encima mía. Yo mientras tanto, me puse la camiseta e intentaba abrocharme los pantalones. Ella se colocó la falda y se abrochó corriendo el escote. Cuando mi madre estaba apunto de vernos, a mi aun no me había dado tiempo ha abrocharme los pantalones, y como estaba excitado, me levanté y cogí un cojín para taparme.-Aquí tenéis chicos.- Ella contemplo la situación y se dio cuenta, pero se quedó callada. Yo estaba tapándome con el cojín, y Miley un poco desordenada. Nos sonrió, y sin decir nada más se fue rápidamente, siendo consciente de la situación.

-No puede ser! Se ha dado cuenta...- Dijo Miley mientras andaba en círculos. Era cierto además, mi madre se había dado cuenta.

-Qué va! Ni se ha coscado.- Ella me miró con cara de "te crees que soy gilipollas?".

-No soy idiota, cuando nos ha visto se le ha puesto una cara que era un poema.-Yo puse los ojos en blanco intentando convencerla. Quería que Miley se sintiera cómoda cada vez que viniera a mi casa, por eso le intentaba convencer de esto. Hice caso omiso a lo último y le dí un sandwich para que comiera. Pusimos una película mientras merendábamos. Era una de comedia que estaba graciosa, "Hermanos por pelotas".

-Te gusta nena?.- Ella asintió con la cabeza sonriéndome. Yo sin poder resistirme, me lancé a besar sus labios. Le cogí la espalda por atrás y la subí encima mía.

-Puff! Rai, estate quieto, tu madre podría volver a bajar.- Yo resoplé mientras le abrazaba.

-No creo que valla a volver a bajar...- Ella hizo un gesto en la cara aclarando que no opinábamos lo mismo.-Venga nena, quiero sentirte...

-Pero este no es el sitio!- Se sentó bien en el sofá y continuamos viendo la película.

5 días después.

Miley se fue ha dar un par de conciertos, así que estos últimos días estaré sin ella. El lunes fui al psicólogo, y mi "terapia", si se podía llamar así, iba muy bien. Incluso el miércoles, cuando estábamos tocando en el estudio, había varias personas que trabajaban allí observándonos, acompañados de más gente. Me puse nervioso? Si, un poco al principio, pero cuando la música empezó ha fluir todo iba de maravilla. Mis nervios desaparecieron cuando comencé a pensar en Miley. Esta semana se ha acabado ya las clases, puesto que es viernes. Los demás días de reincorporación a clase han ido de maravilla. Pablo teme mirarme por los pasillos, he vuelvo a ver a todos mis amigos, he recuperado el tiempo perdido en las demás asignaturas etc. En resumen todo fenomenal. Lo que peor me va es mi princesa, que no esta ahora mismo en California. Hablé con ella por teléfono y me dijo que a lo mejor venía este Lunes. Tenía muchísimas ganas de verla. Le había visto en las noticias, cuando televisaron su concierto. Mañana, Sábado, tiene un concierto en New York. Me gustaría ir a alguno de sus conciertos, sinceramente...pero tiempo al tiempo.

Eran como las 4.30 de la tarde, de forma que me bajé al salón con mi padre para tomarme un café. Mi madre había ido a Francia, a uno de los mas importantes desfiles de moda.

-Hola papá, has hecho café?- Me respondió que si, sacándome una taza.

-Toma, aquí tienes.- Nos sentamos juntos y empezamos ha hablar. A el le pasaba lo mismo que a mi, decía que echaba mucho de menos a mi madre, y que tenía ganas de verla. Yo le dije lo mismo de Miley. En ese momento, en las noticias, se volvía a anunciar el concierto de Miley.

-Mañana sábado, 6 de diciembre, Miley Cyrus, la gran celebridad del pop, actuara en el teatro de New York. Miles de fans están reunidos en la puerta de este, para entrar los primeros.- Dijo el hombre de las noticias.

-Mírala... me encantaría ver un concierto suyo en directo.-Yo miraba las noticias embobado mientras mi padre me observaba.

-Y si te gustaría verla, porque no vas?-Me preguntó el. Me quede pensando durante unos segundos. No esperaba que me hiciera ese tipo de preguntas.

-Qué dices? No hay entradas, y cómo voy? cómo le aviso?- Mi padre miró al cielo resoplando.

-Rai, Rai, Rai... cuantas cosas te quedan por aprender. Lo primero, es que coges un avión a New York, te alojas en su mismo hotel, que sabes cual es, y cuando estés allí le llamas, y se lo dices.

-Ya, claro. Y me ve su padre allí y me vuela!- Mi padre me pegó una ligera patada en la pierna.

-Su padre no estará, el también tiene que trabajar. Si acaso estará Tish.- Yo me quedé mirándole nuevamente.-Yo te lo pago todo, te doy dinero y ya te apañas.

-En serio que me dejarías ir?- El asintió.-Pero por qué?

-Vamos, ya sabes como es todo aquí en Los Ángeles. Las parejas famosas de enamorados jóvenes, van a sus conciertos a verse, viajan juntos, etc. por qué no vosotros? Si te hace ilusión ve.

En cuestión de minutos, mi padre estaba mirando vuelos a New York, y yo estaba preparando mi maleta. La ropa era para un día solamente, pero nunca se sabe lo que puede pasar, de forma que me llevé ropa para tres días. Para el concierto de Miley me llevé algo de arreglar, y lo demás ropa informal. Había un vuelo a las 7 de la tarde. Cuando llegó esta hora, ya estábamos subidos al coche en dirección al aeropuerto. Mi padre me había pagado un par de noches en el hotel. Me dio unos mil euros en metálico y me dejo una tarjeta de crédito. Y sin más rodeos, ya me encontraba montado en el avión dirección New York. Estaba un poco nervioso, ya que estaba viajando solo, de forma que decidí dormirme. Visto y no visto, estaba en mi destino bajándome del avión. Vi algunos paparazzi, que me localizaron y comenzaron a sacarme fotos. Yo sin embargo, estaba casi corriendo, intentando salir rápido. Al salir, localicé el coche que había encargado mi padre. El chofer me agarró las maletas y las colocó en el maletero. Yo me subí y cerré la puerta. Cuando este arrancó comenzó a preguntarme.

-Bueno chaval, vienes a ver a tu novia cierto?-Me pregunto mientras me miraba por el espejo.

-Si, bueno, es una sorpresa. Ella aun no sabe que estoy aquí.- Le sonreí esperando su respuesta.

-Se emocionará de verte. Si te tiene que gustar, como para venir a New York tu solo.- Decía mientras conducía.

-Si, me gusta mucho. Y bueno, la idea más que nada fue de mi padre, que me ha facilitado todo esto.

-Valla, eres un chico con suerte. Espero que te valla todo bien.-Yo le asentí en forma de agradecimiento.

Cuando llegamos al hotel, me baje del coche, y agarré la maleta. Entre al hotel en el que se alojaba Miley. Era un 5 estrellas, y tenía muy buena pinta. Cuando llegué a recepción, salió una chica de unos 22 años.

-Hola, en que puedo ayudarte?- Antes de hablarme, supo perfectamente quien era. Puso una cara de un tanto emocionada, y de sorpresa.

-Buenas, mi padre me ha reservado una habitación. Esta a nombre de Joe van der Archibald.-Ella asintió y me dio la tarjeta.

-Aquí tienes. Penúltima planta, suit 2.

-Vale, gracias. Por cierto, me podría decir en que habitación se aloma Miley Cyrus?-Ella puso cara de dura, sin saber si responder.

-Bueno, no se si te podría facilitar esa información. Mucha gente me suele hacer esa pregunta sabes.- Yo le miré comprensivo.

-Si, te entiendo, pero yo no soy cualquiera, soy su novio. Te lo agradecería mucho. Ella no sabe que e venido a verla, y es una sorpresa.

-Bueno esta bien. Esta en la última planta en la suit 10.

-Esta bien, muchas gracias. Por cierto, no le diga a nadie que me ha visto por aquí.- Ella me guiñó el ojo entendiéndolo todo perfectamente. Ya que había sido una chica muy simpática, le guiñe e ojo y le di un billete de 50 dolares. Ya que venía a gastar a New York, gastaba a lo grande.

Subí a mi respectiva habitación y me puse cómodo. Deje la maleta en su sitio y me puse la televisión. Pasado el rato de descanso, no sabía si llamar a Miley o subir directamente a su habitación. Decidí llamarla.

-Hola princesa, cómo estas?

-Hola Rai! Pues estoy genial, pero echándote de menos!

-En serio? Qué lástima de mi pequeña!

-Jo! Y tu cómo estas cariño?

-Pues muy bien, aquí en mi casa acostado. Por cierto, donde estas ahora? es que como mañana tienes el concierto y eso.

-Pues estoy en mi habitación, que me he puesto un poco con el ordenador, e iba a arreglarme, que me han invitado a una fiesta privada.

-Umm, y tus padres también irán?

-No! Estos últimos conciertos no me han acompañado, los he echo sola con el equipo.- Cuando me dijo que estaba sola, me levanté de la cama y me dirigí hacia su habitación.

-Valla, entonces estas tu sola?

-Si, pero no importa, ando muy a gusto desnuda por la habitación.- Los dos reímos. Estaba delante de su puerta, sin saber muy bien que decirle.

-Bueno, Miley, me haces un favor?

-Si claro, dime!

-Resulta que mi padre me dijo que en la última planta de tu hotel, había algo raro. Las lamparas o algo de eso. Puedes mirarlas, y decirme como son?

-Claro, pero no son nada del otro mundo, son lujosas, pero nada que destaque.- Al acabar de decir esa frase, Miley abrió la puerta de su habitación y se quedó muda al verme.-No puede ser, eres tu?

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Hola a todos! Bueno, se que este capítulo no es muy emocionante pero bueno, aquí es donde se empieza una aventura nueva! Jaja espero que os guste a todos, y que esperéis con ganas el siguiente. ;D

Con cariño

Valkiria